Opinión: Reducción de jornada y los desafíos de productividad

Por: Gabriela Ugalde y Cristóbal Huneeus, Directores Fundación Carlos Vial Espantoso

La reducción de jornada laboral de 45 a 40 horas de forma gradual, recientemente promulgada como ley, es una buena noticia para los trabajadores y su salud mental. Según el 6to. termómetro de Salud Mental ACHS-UC, uno de cada diez chilenos está actualmente recibiendo algún tratamiento de salud mental. Consecuentemente, con esta medida los trabajadores podrán disponer de más tiempo para sus familias, desarrollar actividades personales y descansar.

Hoy en día, para el mundo empresarial que ya enfrenta un desafío relevante en su productividad, la reducción de jornada hará más grande este desafío. En efecto, las cifras no son alentadoras. Es cosa de revisar las estadísticas. Según el Banco Central, el crecimiento de la productividad en el periodo 2012-2019 fue negativo, es decir, actualmente Chile produce con los mismos insumos del 2012 una menor cantidad de bienes y servicios.

Abordar la productividad en las empresas es fundamental debido a que otorga sostenibilidad a una reducción de jornada, es un círculo virtuoso que tenemos que alcanzar. Entonces, ¿cómo combinamos ambos elementos: productividad y reducción de jornada?

La evidencia de productividad muestra que ésta depende de numerosas variables, entre las cuales destacan, la capacidad de innovar, cómo se organiza la empresa, el liderazgo de los mandos gerenciales, el trabajo en equipo y lo que hace el trabajador, y que éstos se sientan escuchados, y por ende motivados. En los estudios de bienestar emocional encontramos la relevancia de gestionar roles claros, autonomía en el cargo, garantizar seguridad laboral, comunicación y equidad en las remuneraciones. Esto tiene impacto directo en la motivación de los trabajadores, lo cual influye positivamente en la salud mental de estos. La evidencia también muestra que la mala salud mental de los trabajadores afecta negativamente su productividad.

Como la productividad se ve influenciada por muchos factores, requiere que todos se involucren, no solo los dueños y gerentes de las empresas sino también los trabajadores. Es en esencia un constante esfuerzo de colaboración y de mucho diálogo para ir lentamente mejorando la forma en que las empresas producen los servicios y bienes que ofrecen.

Como Fundación Carlos Vial Espantoso, hemos visto cómo el diálogo enfocado para mejorar las relaciones laborales, ha sido una herramienta muy poderosa para las empresas, que incide de forma positiva en un conjunto de indicadores que hemos observado como fundación desde el año 2000. Creemos que esta estrategia también se puede usar para abordar otros desafíos dentro de la empresa.

La reducción de la jornada laboral hace imperioso enfrentar el desafío de la productividad. Si todos quieren mejorar de forma sostenible, es necesario cambiar y abordar este desafío, tanto las empresas como los trabajadores, reconociendo que es uno de los grandes temas que necesita enfrentar el mundo del trabajo.